pleyade
26 julio 2019, 16:36
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FICHA TÉCNICA
Formato: epub
Tamaño: 174 KB
Hosts: Userscloud & Uploaded
Sinopsis:
La mujer era alta, esbelta, hermosísima; pero en su rostro de incomparable belleza se notaban las visibles huellas de la demacración producida por la falta de alimentos. La larga túnica que cubría las perfectas formas de su cuerpo caía en estudiados pliegues hasta tocar casi las áureas ajorcas que ceñían sus delicados tobillos, calzados con unas livianas sandalias sin apenas tacón. Tenía los torneados brazos cruzados sobre el pecho y sus grandes ojos negros, miraban el pavoroso espectáculo que tenía ante sí.
Se hallaba junto a un enorme ventanal del gigantesco palacio, de aquel remoto mundo en el cual ella era la reina absoluta. El palacio se encontraba sobre una prominencia geológica que dominaba la ciudad, inacabable en su extensión, pero de la que no llegaba ningún rumor; el silencio más absoluto era su dueño.
Veía, debajo de la semicircular abertura, miles y miles de personas, que, a su vez, miraban hacia ella, con suplicantes ojos, pidiendo mudamente algo que ella no podía conceder, de momento.
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La mujer era alta, esbelta, hermosísima; pero en su rostro de incomparable belleza se notaban las visibles huellas de la demacración producida por la falta de alimentos. La larga túnica que cubría las perfectas formas de su cuerpo caía en estudiados pliegues hasta tocar casi las áureas ajorcas que ceñían sus delicados tobillos, calzados con unas livianas sandalias sin apenas tacón. Tenía los torneados brazos cruzados sobre el pecho y sus grandes ojos negros, miraban el pavoroso espectáculo que tenía ante sí.
Se hallaba junto a un enorme ventanal del gigantesco palacio, de aquel remoto mundo en el cual ella era la reina absoluta. El palacio se encontraba sobre una prominencia geológica que dominaba la ciudad, inacabable en su extensión, pero de la que no llegaba ningún rumor; el silencio más absoluto era su dueño.
Veía, debajo de la semicircular abertura, miles y miles de personas, que, a su vez, miraban hacia ella, con suplicantes ojos, pidiendo mudamente algo que ella no podía conceder, de momento.
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