pleyade
23 agosto 2019, 13:06
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FICHA TÉCNICA
Formato: epub
Tamaño: 167 Kb
Hosts: Userscloud & Uploaded
Sinopsis:
Esto no se acaba, Dios mío, no se acaba. Otra vez estoy en Waterloo, la estación donde Kate se rajó las venas con el ingenuo convencimiento de que alguien acudiría en su rescate, que un Florence Nightingale se arrodillaría y la vendaría y la llevaría en volandas hasta una vida de certezas y dicha. Hace ya casi veinte años. Mucho llanto y rechinar de dientes de por medio. Han limpiado este lugar; ahora está espeluznantemente pulcro y radiante, e incluso parece que laven con jabón las vallas publicitarias cada mañana. Están altas, demasiado altas como para que alguien pueda pintarrajear A LA MIERDA O ARSENAL O MORO O LINDA. En una de ellas se ven las colinas de Gales, unas colinas ondulantes, por increíble que parezca. El verde resulta artificial, chillón, aunque se supone que tiene que persuadir a quien lo vea de que se compre una casa en el puto Gales. Estoy nerviosa de cojones.
Es junio, hace sol y los rayos se filtran a raudales a través de un puto techo de cristal y hierro. No me importaría que cayera algo de lluvia, o una tormenta que se ajustase a las circunstancias. Hay una carta para mí, o eso parece. Apuesto a que será elegiaca… Demasiado elegíaca, coño.
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Esto no se acaba, Dios mío, no se acaba. Otra vez estoy en Waterloo, la estación donde Kate se rajó las venas con el ingenuo convencimiento de que alguien acudiría en su rescate, que un Florence Nightingale se arrodillaría y la vendaría y la llevaría en volandas hasta una vida de certezas y dicha. Hace ya casi veinte años. Mucho llanto y rechinar de dientes de por medio. Han limpiado este lugar; ahora está espeluznantemente pulcro y radiante, e incluso parece que laven con jabón las vallas publicitarias cada mañana. Están altas, demasiado altas como para que alguien pueda pintarrajear A LA MIERDA O ARSENAL O MORO O LINDA. En una de ellas se ven las colinas de Gales, unas colinas ondulantes, por increíble que parezca. El verde resulta artificial, chillón, aunque se supone que tiene que persuadir a quien lo vea de que se compre una casa en el puto Gales. Estoy nerviosa de cojones.
Es junio, hace sol y los rayos se filtran a raudales a través de un puto techo de cristal y hierro. No me importaría que cayera algo de lluvia, o una tormenta que se ajustase a las circunstancias. Hay una carta para mí, o eso parece. Apuesto a que será elegiaca… Demasiado elegíaca, coño.
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