13 de mayo:
Vendrá la guerra, amor con su designio negro, su manto de mentiras verdes y su largo reguero de almas destrozadas. Viudas, huérfanos, desaparecidos. Lágrimas flotando como estrellas y estrellas brillando, como lágrimas.
Vendrá la guerra y sobrarán las estrategias; mis manos guerrilleras marcharán por la sierra de tu cuerpo y mi cuerpo habrá de extenderse, cual parcela dispuesta recibir el trillo de tus besos.
Terminará la guerra y esto dará a las astas un mayor aplomo, para que las banderas inquietas puedan agitarse en todos los rincones del planeta, en cada nación del ser humano.
El océano, como si fuera un corazón, quedará atravesado por la flecha de nuestro coraje. Estando el uno frente al otro, sin más nada que agregar; hallaremos paz en los primeros besos, en la primera caricia y en el ancho deseo de vivir lo que hoy la guerra, no permite.