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Re: La sala del poeta.....
Acariciaste mi pelo, rozaste mi piel
Soñé entonces.
Y mis sueños fueron dorados.
Crepúsculos acariciantes,
colores para mi corazón.
Razones para mi existencia,
susurros para mis desvelos.
Acariciaste mi pelo
Y me desvanecí en sueños.
Rozaste mi piel y oí,
el suave murmullo del viento,
transportando tu pasión
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Pablo Chavarría (19 julio 2011)
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Re: La sala del poeta.....
Esperamos que vengan más y más y muchos más...
Antología de la espina
La rosa de los vientos, del escudo;
la rosa que está en el patio de tu casa
a donde nunca me has llevado.
La rosa de la tarde, del santuario;
la rosa que se abre en el rostro de las
muchachas cuando dejan de ser niñas.
La rosa en el ojal del honorable;
la brillante rosa que se ofrece
igual a los amigos que a los extranjeros.
La rosa sempiterna del poema,
la rosa trémula que crece en el vientre
de las madres primerizas.
La rosa erótica llovida sobre el tálamo;
la rosa cuyo nombre ya no importa,
pues siempre tendrá su aroma dulce.
La rosa taciturna de los cementerios,
la rosa que el amante dejó junto a tu cama
para decir que no piensa marcharse todavía.
La rosa magna de tus labios
que fertiliza la tierra mojada de los míos,
la rosa de tu voz sensible
que es guirnalda de rosas y violetas,
tu cuerpo entero cubierto
por un terciopelo de rosas diminutas.
Cada una que sueño e imagino,
blande sus espinas como dagas decididas;
colmillos con que anuncia que
sigue siendo flor y también fiera,
retrato inacabado, inconclusa sinfonía.
Poema inagotable.
Última edición por Pablo Chavarría; 24 julio 2011 a las 18:21
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