En otras palabras, que tengo razón en cuanto a la naturaleza de estos dos partidos españoles, lo cual, y a decir verdad, no me sorprende en lo absoluto. Pero además, éste mismo fenómeno se da en muchos de nuestros países americanos, donde por lo regular, son dos los partidos políticos que se alternan en el poder, uno de los cuales, casi siempre es de derecha, mientras que el otro se dice de "izquierda". Pero en la práctica, si nos fijamos, resultan ser una misma cosa, aunque con algunos que otros matices, que a la larga, no implican grandes diferencias conceptuales.
Otro fenómeno significativo que he observado a lo largo de toda mi vida, es que la militancia de los partidos derechistas nunca gustan de calificarse como tales; es decir, que es muy difícil oir que uno de ellos se autodefina como "derechista"; mientras que los militantes de partidos de "izquierda" sí lo hacen. Incluso, en algunas ocasiones he escuchado con asombro cómo algunos miembros de partidos claramente derechistas afirman que "Son de izquierda" (?!). Pareciera ser que la palabra "derecha" a ellos mismos les molesta.
Un problema básico en todas estas cuestiones de muchos partidos políticos, es el hecho de que, por lo regular, sus fundadores sí fueron de tendencia izquierdista; pero con el correr del tiempo, sus ideales poco a poco se van transformando, y cuando menos lo esperamos, ya han mutado en organizaciones netamente derechistas, pese a que sus actuales dirigentes lo nieguen. Ya para finales de la década de los 70, recuerdo que el PSOE fue visto aquí, en el Continente Americano, y específicamente en América Latina, como uno de los principales partidos de izquierda de toda Europa y, por ende, un gran aliado para éste lado del mundo. Sin embargo, pareciera que ya no es tal cosa...¡Es una verdadera lástima!...Pero en fin...