De La Piedra al Acero: El Ascenso de los Rascacielos
Maravillas arquitectónicas que arrojan luz sobre los imperios y las culturas antiguas y modernas.Durante años han reinado en los cielos de las ciudades norteamericanas. Eran el símbolo de la prepotencia de EEUU y la confirmación del sueño más antiguo del hombre: llegar más alto. Hoy son enormes moles desiertas, heridas de muerte por la informática que ha llevado el trabajo a casa y ha descentralizado las empresas.
Desde lejos conserva aún ese aura entre prepotente y desafiante, como de cohete despegando a propulsión del suelo. Por dentro está herido de muerte, carcomido por humedades y grietas, aquejado de una enfermedad peor si cabe que el mal de la piedra: la decadencia.Al Empire State le han cambiado extraoficialmente las letras; ahora lo llaman Empty State, porque se está quedando vacío a marchas forzadas. En alguno pisos, como el ruinoso 35, la sensación de abandono es total: oficinas desoladas, paredes desconchadas, carteles amarillentos. Sesenta y cinco años pesan mucho en un gigante de 102 pisos y 381 metros.
La «caída» en picado del Empire State el espejo mismo del ocaso del rascacielos, al menos en Norteamérica. Mientras en Asia se ha desatado la fiebre del «más alto todavía» (las Torres Petronas, en Kuala Lumpur son el nuevo «techo» del mundo), el país que inventó y mitificó los colosos de acero ha decidido volver a poner los pies en la tierra.
Sin embargo el relevo está dispuesto y viene de Asia donde hoy dia se construyen las mayores moles del planeta
[Barcelona] : EDP Editores, cop. 2005
AVI 599 mbs 46 minutos 720x576 Xvid-mp3
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