Era la hora en que el primer rayo de sol hiere de muerte a la noche.
El Conde Drácula cerró meticulosamente el sarcófago y se decidió a esperar al nuevo crepúsculo.
Tenía hambre. Su estómago, ya añoso, no soportaba la sangre de mujeres que no fuesen vírgenes ……. y las agujas son difíciles de encontrar en los pajares.
Le quedaban dos alternativas: la pedofilia, que le resultaba impensable, o convertirse, como predicara Roman Polansky, en un nuevo vampiro gay ……
Porque la tercera, convertirse en polvo de los polvos enfrentando al sol, no era de lo más auspiciosa.
Se aceptan apuestas ……. ¿cómo salvará el vampiro su ya desgraciada vida?
La modernidad es la madre de todos los males. Todo tiempo pasado fue mejor …….